Se han llevado a cabo diferentes estudios donde se relaciona directamente la calidad de vida y la práctica deportiva (en términos de salud) en niños y jóvenes con parálisis cerebral.
Existen revisiones científicas sobre los beneficios de la actividad física y diferentes programas de entrenamiento en niños y jóvenes que presentan distintos tipos de parálisis cerebral. Las publicaciones concluyen que los programas de ejercicio aparecen como una alternativa efectiva para mejorar o mantener los niveles de condición física y de calidad de vida.
Para para resultar exitosos, dichos programas deben contar con una adecuada selección de ejercicios, supervisión y progresión, y centrarse inicialmente en los contenidos de fuerza, estabilidad y flexibilidad, integrándose con trabajos de agilidad y resistencia.
Nuestro equipo, especializado en el ámbito infanto-juvenil, cuenta con diferentes perfiles profesionales para abordar las dificultades asociadas a la parálisis cererbal. A través de la valoración inicial identificamos los principales áreas de mejora y las principales preocupaciones de la familia. Desde ese momento establecemos un programa individualizado adaptado a cada caso para contribuir a mejorar su participación en su entorno más natural (ámbitos familiar, escolar y social).
Trabajamos desde el aprendizaje motor orientado a tareas y actividades funcionales para realizar la transferencia a las actividades de la vida diaria, como la marcha, la resistencia cardiovascular, los ejercicios de fortalecimiento para la mejora de la movilidad, el equilibrio y la capacidad funcional.
Las habilidades y fortalezas, las dificultades que presentan y su impacto en su vida diaria, con el objetivo de desarrollar estrategias y adecuar la intervención a las necesidades individuales.
De actividades físico-deportivas, lúdicas y motivantes, en consonancia con otros profesionales de la salud y basándonos en conocimientos de neurorrehabilitación, con el objetivo de desarrollar habilidades motrices, cognitivas y emocionales que permitan aumentar y mantener la participación en actividades de su día a día.
Programas que mejoran sus habilidades funcionales, previniendo los efectos de un desacondicionamiento físico, para que puedan trasladar estos aprendizajes a sus rutinas diarias y a su contexto habitual (casa, colegio, parque…).
Un aumento en la participación en actividades del día a día y el acceso a una actividad físico-deportiva motivante, que suponga un desafío para mejorar, mantener o desarrollar habilidades funcionales y poder trasladar estas mejoras a otros entornos.
La parálisis cerebral infantil puede conllevar asociadas distintas limitaciones en su participación, algunas de las más habituales se engloban en los siguientes áreas de especialidad:
